El cielo se toma por asalto, no por consenso

27.05.2016 20:28

El invierno se acercaba y no tenían comida suficiente para sobrevivir todo la estación. Las obreras trabajaban día y noche. El hormiguero se alteraba al mismo tiempo que el invierno se acercaba. La reina por su parte ajena a la situación se sentaba en sus aposentos a expensas de la comida.
Al llegar el invierno, las soldados blindaron el hormiguero, una vez que estaban todas dentro, el alimento era insuficiente para todo la estancia. Los días empezaron a pasar y el desabastecimiento llevó a las obreras a dejar de comer para que a la reina no le faltase nada.
A mediados de Enero la situación se hizo ya ingobernable, las obreras se dijeron al aposento real decididas a acabar con la reina y tomar sus pertenencias, las soldados intentaron frenar esta revolución, pero la chispa ya estaba prendida. Cientas murieron, pero su esfuerzo no fue en balde.
El hormiguero celebró la llegada de la República con tres días de fiesta continuada. Crearon un consejo constituyente listo para afrontar el tema de la natalidad.
"Cada seis meses la reina morirará y por votación popular se elegirá una nueva, de esta forma no habrá corrupción y daremos el privilegio ni el perjuicio de modificar su tiempo de vida".